Necesitarás un tratamiento para fisuras anales cuando la fisura persista durante varios días acompañada de molestias de diferente índole. Las fisuras anales se presentan por igual en mujeres y hombres, y normalmente en la zona posterior del ano.
La fisura anal son rupturas que se producen en la piel de esa área; es un doloroso e incómodo padecimiento que se origina cuando existe una lesión en el canal del recto, en su parte más superficial. Esto deriva en que exista dolor e incomodidad al momento de las evacuaciones.
Las fisuras anales se pueden producir por distintos motivos, como por ejemplo una expulsión complicada de heces duras, estreñimiento recurrente, parto, hemorroides, diarrea frecuente tipo explosiva o algunas prácticas sexuales.
Las fisuras anales puede ser agudas que son las que tiene unos pocos días, o crónicas cuando la fisura tiene unas cuantas semanas. Desde el punto de vista médico, el tratamiento para fisuras anales agudas se realizará intentando solucionar la causa, por ejemplo aplicando soluciones al estreñimiento o la diarrea. Por su naturaleza, el tratamiento para fisuras anales crónicas debe ser más específico, y puede llegar incluso a necesitar de la cirugía.
Este padecimiento necesita de la evaluación de un proctólogo, quien podrá ofrecer el mejor tratamiento para evitar que el problema aumente provocando consecuencias más serias. Para el correcto diagnóstico el médico tendrá que hacer una inspección del ano. Para evitar el dolor del paciente se podrá recurrir a anestesia local por medio de una pomada específica.
Si se padece de fisura anal, estas son algunas recomendaciones que se pueden añadir al tratamiento para fisuras anales convencional.
Tratamientos naturales para las fisuras anales
Mejorar el tránsito intestinal:
Una dieta rica en fibra favorece las evacuaciones, de esta forma se puede controlar el estreñimiento o la diarrea que terminan empeorando la sintomatología de la fisura anal. Se debe mantener una dieta equilibra con fibra, bebidas naturales abundantes, evitar alimentos irritantes y con exceso de grasas. Esto ayudará a que las evacuaciones sean más fáciles y no se provoque mayor daño en el canal rectal.
Baños de asiento:
Los baños de asiento son una excelente opción cuando se quieren aliviar los síntomas como el dolor y la incomodidad. Basta con llenar un recipiente, utilizando la cantidad suficiente de agua para cubrir el área de los glúteos; al agua puede agregarse unas cuantas flores de caléndula y una cucharada de salvado de trigo. Permanecer en el baño de asiento por unos minutos y luego lavar la zona.
Sábila:
La sábila o aloe vera tiene muchas propiedades para ayudar para sanar heridas. Toma una hoja de aloe vera y corta el gel de la zona interior en un pequeño trozo de más o menos dos centímetros, puedes colocarlo unos minutos en el congelador para que esté más firme. Luego introduce el trozo de aloe vera levemente en al canal rectal como si se tratase de un supositorio.
Si el dolor persiste se puede recurrir a analgésicos de venta sin receta y será necesario consultar con el médico para evaluar la evolución de la enfermedad.
Video: tratamiento para fisuras anales y falsos mitos
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